Quejas a Empresas Celulares, Lidera Ranking de Quejas

Clarin - Más quejas de consumidores, con los celulares a la cabeza

Según los últimos datos, los reclamos crecieron un 36% con respecto a 2008.

Los problemas con los servicios de telefonía celular siguen siendo la principal queja de los consumidores porteños, que a la vez iniciaron en lo que va del año más reclamos que en 2008.

Los datos surgen de la dirección porteña de Defensa del Consumidor. En marzo, último dato disponible, recibieron 1.139 reclamos, contra 836 de igual mes del año pasado.

El principal motivo, el mismo que encabezó el ránking en los últimos tres años, sigue siendo la telefonía celular, con 216 expedientes abiertos. Las fallas en los aparatos, la mala señal y las discusiones por promociones y venta de los planes fueron los principales motivos de los reclamos. También los pedidos de baja de servicios que no son tomados en cuenta.
Sin embargo, parece natural que este rubro encabece la lista, dado que la telefonía celular es uno de los servicios más prestados.

El segundo lugar en el ranking fue para los problemas con electrodomésticos (136 quejas). Inconvenientes con las garantías y reclamos por reparaciones defectuosas fueron las principales causas.

En tanto, en el tercer puesto aparecen los reclamos contra bancos y financieras (109 expedientes). Empujados por los problemas con las tarjetas de crédito, entre otras causas, este rubro desplazó del podio a las quejas contra los servicios de Internet.

Para evitar inconvenientes, los especialistas de organizaciones de defensa de consumidores recomiendan que los clientes consigan que las ofertas que hagan las prestadoras de los servicios figuren por escrito. También, consultar con más de un vendedor, y anotar datos como el horario de los llamados de consulta para poder así sostener mejor los reclamos.

El aumento en el total de reclamos se dio pese a que desde el año pasado la atención de Defensa del Consumidor se descentralizó en los 15 CGP Comunales. Los críticos de la medida decían que esa decisión podía complicar el servicio, pero el Gobierno macrista defendió la medida argumentando que era una forma de acercar la Dirección a los vecinos en los barrios.