Pero 2009 fue también el de una pequeña compañía que se llama Twitter, que se ha convertido en una impresionante fuerza de comunicación, así como el año en el que las tendencias políticas, económicas, sociales y tecnológicas se aunaron para situar la tecnología verde en el primer plano de la innovación.
2009 fue el año en el que el servicio gratuito de microblogs Twitter se convirtió en el modo de comunicación por excelencia para estar a la moda. Y lo han empleado artistas, políticos y cualquier celebridad que se precie y haya querido dar la impresión de estar al día en temas de conexión a la red.
Pero también se convirtió en un modo esencial de comunicación para cualquiera, desde las abuelas hasta las niñas en edad escolar, pasando por el portavoz de una empresa hasta los ideólogos revolucionarios.
Las protestas contra los resultados electorales en Irán en junio pasado ofrecieron la idea más concreta hasta ahora del poder de Twitter para influir en los eventos mundiales.
Cuando el gobierno iraní cerró otros medios y los canales de Internet, los iraníes siguieron tomando las calles y transmitiendo sus experiencias en los apenas 140 caracteres que se pueden escribir en Twitter, ayudando así a sus líderes a organizar las manifestaciones y permitiendo a los simpatizantes en todo el mundo estar al tanto de su lucha.
La tecnología permite a los usuarios subir de forma instantánea y frecuente sus comentarios vía teléfono móvil, y se estima que este año Twitter creció exponencialmente hasta los 18 millones de usuarios al mes, un crecimiento del 200 por ciento en comparación con el año anterior.
Con la continua proliferación del iPhone y sus competidores- imitadores, los que tuitean y otros tienen una amplia gama de terminales para elegir.
Aun cuando el aparato de Apple se ha convertido en todo un icono y sigue siendo el rey del sector, 2009 vio cómo han madurado los primeros rivales realmente a tomar en serio.
En parte fue así debido a la aparición del sistema operativo de Google, Android, que fue adoptado como plataforma para celulares por cada vez más fabricantes de aparatos telefónicos, sobre todo del taiwanés HTC y de Motorola, la que fuera una de las marcas líderes de la telefonía móvil, que ahora tiene depositadas sus esperanzas de futuro en Android.
Aunque la recesión global frenó el espectacular crecimiento de Google y lo llevó a apuntar sus primeras iniciativas para recortar costes, Google ha seguido dominando este año el mercado de los buscadores de Internet.
Sigue certificando un 60 por ciento de todas las búsquedas en Estados Unidos, pero ahora, cuando los directivos de la compañía miren por el espejo retrovisor, tal vez vean cómo se aproxima la pequeña y distante imagen de un gigante.
Tras años de chapuzas de Microsoft para intentar afianzar el dominio de su navegador Internet Explorer, el gigante de software de Seattle finalmente ha consiguido hacer algo realmente bien con su buscador Bing.
Esta nueva tecnología, que contó con una promoción extraodinaria y ha recibido críticas elogiosas, ya ha conseguido arrancar un 10 por ciento del mercado desde su lanzamiento.
El acuerdo de Microsoft para ofrecer Yahoo! con su tecnología de buscadores y las conversaciones con proveedores de noticias para ofrecer en exclusiva sus contenidos podría convertirlo en un formidable rival de Google.
Microsoft obtuvo finalmente el derecho para lanzar su sistema operativo Windows 7, menos de cuatro años después de haber lanzado Vista, del que muchos se burlaron.
Según Microsoft, el nuevo sistema operativo se ha vendido el doble que Vista durante su periodo de estreno. El lanzamiento en octubre también ayudó a hacer subir las ventas de ordenadores durante las crucial época de Navidad.
Pero tal vez la noticia más importante desde el punto de vista tecnológico de este año no gira en torno a la última innovación informática, sino en cómo cada vez más gana más espacio el desarrollo ecológico y sostenible en este tipo de tecnologías.
Según la empresa CleanTech Ventures, que sigue la pista a estas tendencias, las inversiones estadounidenses en tecnología verde sumaron 1.590 millones de dólares en el tercer trimestre de 2009, registrando el segundo incremento trimestral consecutivo, después de que la recesión global las hiciese retroceder bruscamente.
La industria verde tuvo el apoyo este año del gobierno del presidente Barack Obama en el marco de su paquete de estímulo financiero, que apartó casi diez por ciento de los 70.000 millones de dólares para una energía más eficiente y nuevas alternativas.
Las grandes inversiones se hicieron fuera del entorno gubernamental y las empresas de riesgo. ExxonMobil, por ejemplo, invirtió 600 millones de dólares en una empresa de San Diego que intenta conseguir combustible de algas, mientras dos compañías con sede en California han recibido casi mil millones de dólares en incentivos gubernamentales para desarrollar coches eléctricos.
Los inversores privados también se han mostrado bastante predispuestos a soltar el dinero si veían que podían sacar beneficio de los bajos precios en las acciones de compañías tecnológicas emergentes.
Pero mientras 2009 fue un año de recuperación de la tecnología ecológica, para 2010 parece que se anuncia un regreso significativo del aumento de los precios del crudo y se seguirá prestando atención a centrar la economía que favorezca un menor uso del carbón alentando el interés por la energía alternativa.
"Preséntenme sus planes de negocio", dijo el empresario Steve Westley en una conferencia de tecnología industrial. "Estamos dispuestos a empezar de nuevo el patrocinio".
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