Cada vez más hogares eligen televisores con súpermonitores. Cuándo conviene comprar un tipo de pantalla u otra.
Hace un tiempo, cambiar la tele solía ser una misión familiar bastante sencilla. Se contaban los billetes y, según el grosor del fajo, se elegían las pulgadas del próximo TV. Pero, la pantalla chica dejó de ser tan chica y, encima, creció veleta. Se enamoró de distintas tecnologías que dieron a luz a una variada gama de televisores, que incluyen pantallas de LCD y plasma, TV de tubo con pantalla plana y teles de retroproyección.
Pero, ¿cuál será el futuro televisor estándar de la casa? Los fabricantes de televisores apuestan al LCD, en especial en tamaños de entre 23 y 40 pulgadas. Aunque por un tema de bolsillo, las clásicas teles de tubo de rayos catódicos (CRT) todavía tienen un rincón de hogar asegurado.
Entonces, ¿el plasma ésta destinado a desaparecer? Por el momento, no. Arriba de las 50 pulgadas, la corona la llevan los televisores de plasma, con pantallas que llegan a las cien pulgadas, como el Panasonic Plasma 103". Escribir su precio en la Argentina sonroja a quien escribe: $220.000.
Los LCD rondan de cerca, serrucho en mano. Samsung creó un modelo de TV LCD de 82" y Sony, uno de 70". Ninguno de los dos está todavía a la venta. Eso sí, en los Estados Unidos se puede reservar el Sony por 30.000 dólares.
Aunque todavía se los ve en las góndolas, los televisores de retroproyección están destinados a salir del ring. No pueden competir con el precio, la calidad de imagen y la delgadez de las pantallas de plasma y LCD.
«9¿Plasma o LCD?. Hay un viejo mito que dice que los TV de plasma tiene una vida útil menor que los LCD y CRT. Pero desde hace un par de años no es así: los nuevos plasmas duran entre 50 y 60 mil horas, igual que un LCD o CRT, antes de perder brillo.
Los LCD, por su lado, cargan con el fantasma de tener un ángulo de visión bastante menor que los 180ø que ostentan los televisores estándar. Pero esto también perdió actualidad, porque los nuevos LCD logran un ángulo de 178ø. El ángulo de visión de los plasmas ronda los 160ø.
Pero, plasma y LCD tienen una diferencia: los plasmas poseen más nitidez de colores (tonos realistas) y los LCD mejor contraste (imágenes impactantes).
Abajo de las 42 pulgadas, LCD y plama no compiten: ese territorio pertenece sólo al LCD. La oferta arrancá con LCD de 20", como el Admiral ($2000). Por $300 más se puede comprar un LCD Sanyo de 23". El Philips de 23" cuesta $2.999 y el Sony 23", $3.799. También cuestan $3.799 el Philips de 26" y Philco de 27".
A partir de las 30 pulgadas, el precio pega un salto. Entre los más baratos están los LCD de 32" de Admiral, Seiko y Sanyo, cualquiera de los tres a $3.999. Ape nas por encima está el AOC, a $4.300. Un poco más caros el Philips 32" ($4.499), el Samsung 32" ($5.999) y el Sony 32" ($6.499). Entre los LCD de treintaypico están los de 37", como los de Philips ($7.499) y Sanyo ($7.999). A partir de las 40", se puede elegir entre un TV LCD o uno de plasma. Dentro de la misma marca, los de plasma son más baratos.
Algunas ofertas de plasmas de 42" son Admiral ($4.999), Seiko ($5.499), TCL ($5.999), Panasonic ($6.999), Philips PF7321 ($6.999) y Philips Ambilight ($8.999). LG tiene un plasma de 42" con disco de 80GB a $9.999.
Entre los LCD cuarentones están Sony 40" ($9.999), Admiral 42" ($6.999), Philips Cineos 42" ($15.999), Sony 46" ($15.999) y LG ($10.999).
La oferta para amantes de las pantallas extra large, de 50" o más, incluye los TV de plasma Panasonic 50" ($17.999), Sony 50" ($18.999) y Panasonic 65" ($49.999).
Al elegir el tamaño de la pantalla conviene tomar en cuenta las dimensiones de la habitación. Hay una regla que dice que cada pulgada de pantalla wide (ancha) exige una distancia de 8cm entre el sillón y la tele. Para una tele de 32" el cálculo da 2,5 metros.
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